Un director de cine que ama lo que hace, define su carrera en una sola palabra: “pasión”. Los que quieren incursionar en ese mundo tienen que ser soñadoras, apasionadas y ¿por qué no? un poco locas, en palabras de José Luis Cano, director duranguense, que recientemente presentó en cortometraje Centauro en el Festival del Nuevo Cine Mexicano de Durango.
Desde la secundaria, José Luis ya tenía la idea de que quería hacer cine, pero a falta de oportunidades dentro de la ciudad de Durango, decidió comenzar a estudiar la carrera de Administración, la cual abandonó cuando le llegó la oportunidad de estudiar en el CCA (Centro de Cinematografía Dolores del Río). José Luis pertenece a la primera generación y lleva aproximadamente tres años ayudando en algunos festivales, incluyéndose en proyectos y, sobre todo, muy al pendiente de los talleres de cinematografía que se realizan en esta ciudad.
La superación es vencer los obstáculos y dificultades, tal y como lo hace José Luis, ya que actualmente estudia un diplomado de dos años y está muy contento de compartir con personas apasionadas, que tienen hambre de hacer cine al igual que él. Uno de los obstáculos más grandes a vencer es que en Durango apenas hace unos años no existía ninguna escuela cinematográfica, la llegada del CCA creó parte del movimiento que se trata de descentralizar el cine de la ciudad de México, sacar toda la industria de allá para que también se haga en el norte.
“Esta escuela se considera ya como una de las mejores del norte del país, creo que estamos en el momento específico de que el cine puede volver a Durango, al menos el cine mexicano y creo que todos los estudiantes del CCA en cuestiones de ego o de presunción, estamos siendo parte de este movimiento, cada día se están incluyendo más. Ahorita por ejemplo se está filmando aquí en Durango una película que se llama El Diario de Karem y en este rodaje las primeras personas que se contactaron para rellenar las necesidades de la producción fue nuestra escuela, estamos teniendo capacitación para hacer cine, ya sabemos cómo funciona un set cinematográfico, las condiciones del rodaje, etc. Es muy importante estar muy bien capacitados para que las personas que representen al CCA y sobre todo a Durango, pongan en alto su nombre”, explica.
Cada director tiene su estilo y José Luis, en sus tres cortometrajes ha tenido una temática similar: son documentales. El primero de sus trabajos se llama Cinema Nostalgia y fue hecho para un programa de cine documental que se llama Polos Audiovisuales. Habla sobre la decadencia del cine nacional, tanto en exhibición, como en producción, distribución, cómo fue decayendo. El segundo de sus trabajos se llama Retrovideo, que aún no ha sido exhibido. En él habla un poco de la decadencia de los videoclubs a causa de la piratería.
Con su último documental, Centauro, trata de demostrarles a las personas que son soñadoras, que son duranguenses, y en específico a las que sueñan con hacer cine que “se puede llegar, pero hay que llegar”, frase en la que cita al cineasta duranguense Hernando Name.
Ser agradecido es una de las cualidades de José Luis y él tiene una deuda con el cine, pues lo ha acompañado en momentos malos y buenos, siempre ha estado incondicionalmente para él desde que era un niño. Con estos documentales quiere pagarle un poquito y agradecerle al cine, hablando sobre él, difundirlo, dejarles reflexión a las personas y quizás, de una manera muy personal, transmitirles el amor hacia él.
José Luis recomienda dos cosas a las personas que buscan incursionar en el medio del cine: la primera es rodearse de personas apasionadas, que tengan en verdad pasión por lo mismo, porque el cine puede consumirte hasta 16 horas diarias, por eso hay que estar rodeado de personas iguales. La segunda es apoyar, una vez que empezaste a tener más experiencia, hay que apoyar a las personas que lo requieren, hay que perder muchos miedos, sacar todas las ideas sin ningún tipo de vergüenza, dejar que fluya la creatividad y expresarla tal cual.
Luis Buñuel fue uno de los primeros en hacer surrealismo en cine y José Luis lo admira y recuerda una de sus películas Los Olvidados, así como El Escapulario, que no es de Buñuel, pero también es surrealista. Le gustaría contar historias con temática social, cosas que afectan a la sociedad y no solo a la actual, sino que siga vigente por años, que digan: “no, esto todavía está pasando, esto pasaba antes”, historias que trasciendan y que se mantengan.
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