martes, 30 de abril de 2019

Los androides del mundo Alien

texto ANDREI MALDONADO

Si hay una película que se haya adentrado a describir la psicología que tendría un organismo sintético con aspiraciones a sentir lo “humano” esa es Blade Runner, de Ridley Scott. En aquella película los llamados “replicantes” están en una constante búsqueda de sus raíces y una persecución encarnizada por parte de quienes no comprenden su naturaleza robótica.

Scott ya había asomado algunos de esos rasgos con el personaje de Ash, quien es el primer sintético que aparece en la saga. Ash, quien es enviado por la compañía para traer consigo al xenomorfo, declara abiertamente su admiración por la criatura, a la cual llama un “sobreviviente” y al que no lo acomplejan los conflictos morales que poseen los humanos y que, quizá, él mismo tiene.

En Aliens la figura del robot, en cambio, pasa a ser la de un aliado, pues Bishop ayuda en todo momento a Newt y Ripley para escapar de LV426. En Alien3 aparece un nuevo Bishop, quien asegura no ser el robot, sino el auténtico humano que creó a esos robots. Pero su rígido comportamiento sobre quedarse con el xenomorfo que lleva Ripley en el pecho hace penar que también era un androide.

En Alien: Resurrección nuevamente el personaje del sintético se suaviza. Cole, última sobreviviente de su género, intenta salvar a los humanos. Pero pese a lo simplista que pueda parecer este análisis sobre su personalidad, la realidad es que Cole esconde más: odia su condición de robot, quisiera ser humano, y guarda cierto recelo, pero también admiración, por el clon de Ripley.

Completamente distinto es David, el primer androide construido por la compañía. Él, que desde su creación ha servido a su inventor, va desarrollando un profundo desprecio por los humanos y un deseo ferviente de dejar de servir para crear. Podemos decir que las aspiraciones de David son las de llegar a ser un dios, aspiraciones que crecen en Alien: Covenant.

En esta película aparece nuevamente el androide servicial, de nombre Walter. Él entra en conflicto cuando se encuentra con David, quien lo interpela sobre su servilismo y lo confunde con relación a lo que siente por Daniels. Finalmente, David reclama para sí el papel de protagonista al eliminar a Walter y apoderarse de la nave Covenant para sus propios experimentos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario