texto JUAN JOSÉ ANTUNA ORTIZ
En un ejercicio de análisis bastante centrado y conciso, escribo sobre las más que interesantes películas que se proyectaron en el recién terminado Festival de Nuevo Cine Mexicano, esto con el fin de, si alguno de ustedes lectores tiene la oportunidad de verla en algún festival venidero, por favor lo hagan, ya que todas son producciones muy recientes, y de gran propuesta.
Mamá
La ópera prima del realizador Xun Sero, es definitivamente uno de los documentales más interesantes, personales y bellos de este año dentro del cine mexicano, y no es mucho decir que además es, más en su forma que en su fondo, pero sin que este esté tan alejado el uno del otro, uno de los más valientes.
Narrado de una manera contemplativa, orgánica, y en muchos momentos, incluso de manera poética, en el momento en que cuenta la historia de su madre, y en muchos sentidos la propia misma del realizador; toca una historia en la que muchos espectadores encontrará de alguna manera y por muchos momentos el reflejo de la propia.
El diálogo entre Xun y su madre, hilvana un discurso que da muestra de un personaje riquísimo, que tiene luz más allá de su contexto cultural, pues es un personaje que da voz a una lucha muy presente y vigente, en un contexto histórico en el que muy pocas veces las mujeres pudieron elegir su destino y librar la lucha que no solo se libra en comunidades indígenas de nuestro país por las presiones y ciertas costumbres muy cuestionables de estas comunidades en términos del machismo, sino en muchas estratos sociales de un sin fin de rincones del mundo.
Se podría decir que la señora Hilda encabeza a un puñado de mujeres adelantadas a su tiempo que tuvieron que sufrir y llorar el tener que salir de su comunidad de origen para poder sobresalir, sobrevivir y dar una vida digna y de amor a sus dos hijos, a pesar de su ausencia. Es en muchos sentidos, y así es como yo definiría el extraordinario trabajo de Xun, como una carta de amor a su madre de un hijo arrepentido.
Escocia no es un banco
Este largometraje documental empieza siendo una cosa y termina siendo otra, con pasajes realmente disfrutables, pero al final no termina para el trabajo en conjunto en una experiencia redonda para el espectador, me explico.
El principio y primera tercera parte del documental parece y da pie a que uno lo piense como un documental musical en toda su esencia, guitarrazos, extroversión y el retrato fidedigno de una banda representativa de su escena, es decir, el Punk. Material de archivo y entrevistas enriquecen este sueño del líder de "Los nuevos Maevans" para volver a juntar la banda luego de casi 30 años de su separación, pero justo en el momento que los empieza a contactar, es que el documental se transforma en una cosa realmente interesante.
El documental en su segundo tercio es un trabajo de estudio de personajes, mostrando, en primera instancia su exterior, o lo que quisieron aparentemente mostrar ante la cámara, para al final despojarse de esta máscara y mostrarse como realmente son, y aunque para algunos está claro el camino que eligieron y lo importantes que fueron para la escena, otros no pueden asimilar o aceptar, la dura realidad que tuvieron que pagar por la factura que les pasó la vida.
La tercera parte, si bien no contrapone ni pierde el discurso de lo que se plantea tanto en la primera como en la segunda, si deja caer el ritmo estrepitosamente, y hace que uno pierda interés, pues un documental sobre una banda punk, si bien es congruente que termine con su líder viviendo en la calle (un acto muy punk, si a mí me lo preguntan) esto se retrata más que como un triunfo de la ideología sobre las otras, se retrata con una esencia muy triste, como una derrota, y al final el documental es el que paga, pues termina por desvanecerse.
Placeada
Documental de la experimentada documentalista Alejandra Sánchez que retrata de manera muy íntima el testimonio y la vida de la ex-sicaria, que narra desde que se integra a la vida delictiva hasta su reintegración a la sociedad, todo esto acompañado de una manera, cinematográficamente hablando, magistral con un discurso a base de material de archivo del contexto político social de nuestro país.
El documental en preciso, aún con el tema que retrata, y con la exposición misma del testimonio del personaje protagónico, lo hace de manera muy cuidadosa y sutil, jamás cayendo en los lugares comunes en los que muchas veces estos temas son retratados por productos audiovisuales más mainstream y sensacionalistas.
Crea a su vez, y echa mano para su narrativa de elementos de la ficción (la recreación de la adolescencia del personaje con su mejor amiga) que aligeran lo tenso del testimonio y que crean un trabajo por demás completo en el sentido propositivo de la obra.
Se siente un trabajo en el estricto sentido de la palabra, documentado, con una investigación de tras que hacen un trabajo completo. Sencillo en su hechura pero que toca temas secundarios pertinentes que ahí están y que no se sienten azarosos o de alguna manera fortuitos, cuyo discurso y tesis es por demás valioso.
Las colonias
Son muchas las virtudes que yo encuentro en el trabajo de Luis y que ya he expuesto escribiendo sobre él en mi blog, pero quizá esclareciendo acá de manera más breve mi sentir sobre, es que me parece uno de los documentales más auténticos de los últimos años del cine mexicano, pues retrata de manera muy centrada esta comunidad tan cercana y conocida por los duranguenses, pero que conocemos muy poco de manera profunda.
El retrato que hace Luis en una distancia por demás prudente, nos deja a nosotros los espectadores centrarnos y poner vital importancia a las cosas que vemos en pantalla y a los testimonios que se dan, ya sea con una persona hablando a cámara o con solo la voz en off, nos detenemos en las pocas palabras que escuchamos, pero que nos hablan de manera concisa de las cosas importantes para ellos, su manera de relacionarse, sus orígenes, cómo llegaron a nuestro estado, sus modos de manejarse ante la vida, tanto en lo económico, en lo social, en lo religioso, y cómo la manera hermética en que vivieron durante muchos años queriéndose alejar del mundo exterior, les trajo ruptura y división entre ellos, así empezándose a cuestionar si valía la pena morir y dejar morir su ideología.
De ahí que sea tan valioso el trabajo de Luis, que tiene como hilo conductor a tres hermanos menonitas que aparecen en el documental siempre que se toca un tema importante, como hilo conductor de la tesis: mostrar como protagonista a esa comunidad cuyas formas de vida son muy diferentes a nosotros.
El reino de dios
La cuarta película de la realizadora Claudia Sainte-Luce no solo podría mencionarla como una de mis películas favoritas del festival, sino que es una película que nos muestra mucho de lo que los festivales de cine deberían de defender y además impulsar, ese cine hecho con muy pocos recursos, pero con mucho corazón en las historias.
Una película pequeña en muchos sentidos, pero con una historia muy bella que retrata la vida de un pequeño que en el proceso de hacer su primera comunión pasa entre la cotidianidad y sus juegos en el pueblo donde vive, muchos dolores que lo empiezan a hacer crecer, y que la vida es una subida y bajada de emociones, las mismas por las que los espectadores pasamos junto con él, y que nos hacen recordar esos juegos de niños.
Un niño que nos hacer ver con mucha magia lo que sus ojos ven y todo lo que compone su pequeño mundo dentro de ese pueblo, somos testigos de sus juegos, de las personas con las que interactúa, y en ese desarrollo vemos una historia en la que Claudia vuelca con todo su bagaje narrativo, un amor que desborda la pantalla, haciendo de esta película un pedazo más que valioso del cine autogestivo e independiente.
Mi novia es la revolución
La nueva película del experimentado director y profesor de cine Marcelino Islas, es una película seria en todos los sentidos, pero que, aunque se siente más una producción en forma, es decir, que se siente una película grande, hay algo que hace que uno la identifique como una película independiente muy cercana al realizador; ya que uno atiende todos los elementos que la hacen muy personal, uno se da cuenta que las historias que nos importan se notan al instante.
El cine de Marcelino es un cine que siempre toca historias de personajes femeninos en un cambio o un despertar, sin importar la edad o la posición social de estas, pero en esta se siente aún esta búsqueda, o este antes y después de Sofi, la protagonista de la película, quien además en la vida real es la hija de Marcelino, y su vida se ve transformada por una chica de nombre Eva, acompañada de atracos y rock.
La película explora este crecimiento y este cambio al que le antecede una mudanza y la separación de sus padres, encontrando en Eva esa necesidad de compartir con alguien su despertar no solo emocional y sexual, sino su despertar a la vida, y como este se ve acompañado de golpes, llantos y abandonos, y cómo en algún momento nos podemos reencontrar o no con las personas que en algún momento nos alejamos, como lo puede ser nuestra madre, o una amiga.
La película además es recreada en un contexto social muy importante en la historia, no solo de las personas que lo vivieron en diferentes etapas de su vida, sino del país entero, como lo fue ese 1994 tan difuso; con la crisis, el cambio de moneda y el cambio de gobierno y todo el contexto que esto supuso, de ahí que el departamento de arte y producción tuvieran un trabajo tan complejo y lo llevaran a cabo de manera perfecta, y además de una manera muy meticulosa y detallista, con elementos tan sutiles que uno al distinguirlos, agradece su hechura.
Ante las historias femeninas y queer por parte de directores hombres y no homosexuales, y cómo muchas veces se les señala o se les cuestiona sobre la validez de estos por retratar estos temas, yo solo puedo decir que quienes critican estas cuestiones deben ser, además de personas muy cerradas, personas que no observan su alrededor y todos los posibles fondos y contextos de las historias que tocan estas películas, pues al ver una película sobre el amor entre dos jóvenes, veo por sobre todas las cosas una historia de amor, y creo que eso lo hemos vivido todos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario