domingo, 29 de mayo de 2016

Foro Carpe Diem: no todo es real, no todo es ficción, todo es cine

por NITZIA RUIZ ZAPATERO
fotografía CORTESÍA

Apenas hace un año el Foro de Expresión Cinematográfica Carpe Diem (FECCD) veía la luz pues después de tocar muchas puertas, la necesidad y el planteamiento de un proyecto como este se había aterrizando.

Tras el éxito obtenido en la primera edición, los directivos Darío Vargas y Ana Espino incrementaron su equipo de trabajo pues para el segundo foro, que se llevó a cabo el pasado 28, 29 y 20 de enero en Salamanca, Guanajuato, Carpe Diem planeaba un crecimiento considerable. Lo que se había comenzado como una plataforma para la iniciación cinematográfica ahora incorporaba como parte de sus actividades una muestra donde se vería lo mejor del cine mexicano hecho en los últimos tiempos.

La importancia de esta muestra se planteó en base a la necesidad de un público con ganas de ver cine mexicano, mismo que difícilmente tiene acceso por la nula distribución en salas de cine. De esta forma, Carpe Diem programó tres días con una muestra gratuita como parte de sus actividades, esta se dio lugar en Cinépolis Salamanca, abarcando una cartelera con cuatro grandes producciones: El incidente de Isaac Ezban, Güeros de Alonso Ruizpalacios, González de Christian Díaz Pardo y La Tirisia de Jorge Pérez Solano; estas dos últimas con talento invitado en la proyección, por parte de La Tirisia el actor Noé Hernández, quien da vida a Canelita, y de la película González el protagonista de la historia Harold Torres.

La comunidad salmantina, así como gente de ciudades cercanas, se congregaron para ver estas películas, sin embargo, el día más esperado por todos se vivió en el cierre del foro con la presentación de la Competencia de Cortometrajes. Esta competencia conforma el corazón del foro, pues aquí se convoca a jóvenes realizadores de todo el país que busquen llevar sus historias al cine para ser proyectadas en pantalla grande durante el marco del Foro Carpe Diem.

La competencia que este año, a diferencia de la primera edición, se dividió en Categoría Ficción y Categoría Documental, y de igual forma, extendió la convocatoria al recibiendo por primera ocasión a jóvenes de otros estados de la república, siendo los invitados del 2016 Querétaro y Aguascalientes.

La parte importante del foro se vivió aquí pues estos cortometrajes, que tuvieron una duración de 10 minutos, fueron realizados con una preparación pues Carpe Diem otorgó a los participantes talleres de sonido, edición, entre otros, dando preparación por conocedores de la industria a aquellos que por primera vez tenían un acercamiento con el séptimo arte; además, cada equipo tuvo un ‘couch’ quienes en el proceso dieron seguimiento a los proyectos.

El día llegó, 30 de enero del 2016 y cada uno de los realizadores se encontraban entusiasmados por ver los resultados finales, los cuales serían evaluados por un jurado conformado por Noé Hernández, Harold Torres, Jesús Chavarría, Francesca Guillén y Rafa Lara.

La ceremonia se llevó a cabo en la Casa de la Cultura de Salamanca, primero se proyectaron los documentales (todos grabados en Salamanca, Guanajuato), Herencia de mi Tierra de Xavier Macías, El Nopal de Karen Razo y La Querencia de Erick Rodríguez; en seguida fueron las ficciones, de Aguascalientes el corto Dolores de Ángel Araujo, de Querétaro Intrusos de Rafael López y de Salamanca La señal del palomo de Froylan Ávila.

Todos los cortos mostraron diversidad y temáticas variadas, siendo seis trabajos de gran calidad, se decidía el veredicto mientras un detrás de cámaras con las vivencias del foro era proyectado hasta que llegó la hora y el jurado calificador decidió otorgar el premio a mejor documental a Herencia de mi Tierra, el cual aborda el tema de la producción del nopal en la comunidad de Valtierrilla, historia que gira en torno a una familia de mujeres trabajadoras.

En la ficción, el cortometraje Dolores fue el galardonado con una historia bien contada sobre una chica transgénero y las adversidades que, aún en nuestros tiempos, se siguen viviendo. Los ganadores en cada categoría recibieron un premio en efectivo por 15 mil pesos y un viaje a las playas de Huatulco, así como la promoción de su cortometraje durante seis meses en diversos festivales del mundo.

Sin lugar a dudas la experiencia Carpe Diem fue fructífera no solo para sus participantes, sino para una comunidad entusiasta de voluntarios, talleristas, patrocinadores, jurado, invitados especiales y todo el equipo involucrado que intervino en la organización de la segunda edición, personas que apostaron por hacer y traer cine a Salamanca. Una segunda edición que nos deja a espera de la siguiente, con mucho y más del buen cine mexicano ¡Larga vida Foro Carpe Diem!

No hay comentarios:

Publicar un comentario